La estrategia es provocar una baja de los precios internos.
Luego de haber limitado durante casi tres semanas las exportaciones de carne, cuyos permisos para vender al exterior volvieron a ser lentamente aprobados, el Gobierno ahora decidió restringir el comercio de leche en polvo. Lo hace en un momento con precios récord en el mundo para este producto, pero en cambio con valores internos atrasados para los tamberos en su materia prima tras la devaluación.
Según fuentes empresarias, en las últimas horas desde la Secretaría de Comercio llegó el mensaje de que estaban trabadas las autorizaciones de nuevos permisos de exportación hasta fines de marzo.
La noticia circuló rápidamente entre los industriales, quienes frente a esta situación estarían buscando que el Gobierno por lo menos habilite para marzo de 2014 la exportación del mismo volumen que se vendió en igual mes de 2013. En marzo del año pasado fueron al exterior casi 12.000 toneladas. En tanto, en todo 2013 se exportaron 205.297 toneladas de leche en polvo.
El objetivo del Gobierno es provocar una sobreoferta interna para que caigan los precios al público, si bien ya hay una brecha importante entre lo que cobran los tamberos y el precio final. Las empresas lácteas más afectadas por la medida son las que destinan la mayor parte de su producción al mercado externo.
Esta decisión se conoce en un momento en que los productores comenzaron a realizar asambleas para evaluar un plan de protesta. Con la devaluación, sus precios quedaron atrasados, mientras sus costos dolarizados subieron.
Fuente: La Nación