El presidente del Círculo de Veterinarios de Pergamino, Martín Urruchuaga, trazó un panorama acerca del ejercicio actual de la profesión. La carrera de Veterinaria se creó un 6 de agosto de 1883, dando nacimiento así al profesional al servicio de los pequeños y grandes animales.
Hoy se conmemora un nuevo aniversario de la creación de la carrera de Veterinaria en nuestro país, hecho acontecido el 6 de agosto de 1883.
En lo que respecta a nuestra ciudad, la entidad que agrupa a los profesionales de esta actividad es el Círculo de Veterinarios de Pergamino, fundado en noviembre de 1997. Parte de las tareas que lleva adelante están orientadas hacia la concientización de la sociedad respecto de cuáles son los roles de los veterinarios y de las especialidades como salud animal, bromatología, tecnología de alimentos y prevención de enfermedades de animales exóticos.
En lo referente a la salud animal, además del quehacer vinculado con la producción pecuaria, la actividad se orienta a la disminución de la transmisión de zoonosis (enfermedades que se contagian del animal al hombre).
Si bien hay distintas áreas para el ejercicio de la profesión, las dos principales o más abarcativas son la orientada al desarrollo y cuidado de animales de producción pecuaria y la que se ocupa de las mascotas, es decir grandes y pequeños animales, respectivamente.
La actualidad
Desde diciembre de 2011 el Distrito Nº 11 del Colegio de Veterinarios de la provincia de Buenos Aires cuenta con una comisión directiva integrada por veterinarios pergaminenses, con Severo Vila como presidente.
El Círculo de Veterinarios de Pergamino cuenta con alrededor de 70 profesionales asociados e integra el Distrito Nº 11, con sede en San Nicolás, de los 14 que componen el Colegio de Veterinarios de la provincia de Buenos Aires.
El presidente de la entidad es el médico veterinario Martín Urruchuaga, que en diálogo con LA OPINION brindó un panorama acerca de las últimas actividades del Círculo: “En los últimos tiempos hemos estado reuniéndonos para algunas cenas institucionales, estamos tratando de reunir más a los colegas, hemos realizado algunas jornadas y charlas técnicas con el apoyo de laboratorios, como por ejemplo una charla sobre pequeños (intoxicaciones) y grandes animales (parasitosis)”.
En esta profesión existen muchas personas que trabajan de manera autónoma, con su comercio, y otras que llevan adelante su profesión en forma particular. En este sentido Martín Urruchuaga analizó que los actuales costos “nos están impactando como a todo el mundo, hay un desmedido aumento tanto de la industria farmacéutica como la alimenticia o nutricional, la mayoría son empresas multinacionales y los costos los manejan desde otro lugar; entonces el profesional va disminuyendo sus ingresos o sus honorarios para reducir los costos. Existen empresas que, en lo que va del año, ya aumentaron tres veces el 20% sus productos, aunque hay otras que no aumentaron tanto pero acompañan la inflación”.
-¿Cómo impactan estos valores en el bolsillo de quienes acuden a una veterinaria?
-La gente empieza a buscar otras opciones y generalmente a disminuir la calidad, por ejemplo cuando se trata de alimentos para mascotas. Y así como en algunos casos el veterinario baja sus honorarios para que le cierren los números a él y a sus clientes, la gente también hace lo mismo y baja la calidad de los productos que compra para sus animales.
-¿Qué mensaje deja a sus colegas?
-Saludarlos en este día y que sigan luchando por esta hermosa profesión, digna y hermosa para ejercerla, tanto quienes trabajan en forma privada, pública, en laboratorios, etcétera, ya que es una profesión muy amplia.
El perfil del veterinario
De nuestra zona han surgido reconocidos veterinarios, algunos que poseen prestigio a nivel nacional, ya sea por su actividad en la investigación como por la capacitación a terceros. Otros, no tan famosos, están al servicio de los pergaminenses para la atención de sus pequeños o los grandes animales.
En una publicación de la Federación Veterinaria Argentina se aborda el perfil del médico veterinario. Allí se señala que “es el profesional que, en función del mejoramiento de la calidad de vida y el desarrollo humano sustentable, imbuido de un espíritu ético, científico y humanístico, sea capaz de ejecutar acciones tendientes a la previsión, planificación y resolución de la problemática planteada en diferentes ámbitos de la realidad sociocultural y del medio ambiente, con relación a todo lo que directa o indirectamente sea atinente a las especies animales”.
Un día para recordar y muchos más para crecer y seguir trabajando
El Colegio de Veterinarios de la provincia de Buenos Aires saluda y reconoce, una vez más, a los profesionales que día a día ejercen su labor al servicio de la salud, entendiendo que la mejor forma de hacer la diferencia es trabajando sobre el abordaje integral de la sanidad animal y la salud pública.
Para la Organización Mundial de la Salud (OMS) “la veterinaria es (con relación a la salud pública) el conjunto de actividades que protegen y fomentan el bienestar humano, valiéndose del acopio de conocimientos y recursos de todos los interesados en la salud humana y animal y en sus relaciones mutuas”. Hace mucho tiempo que el rol del veterinario dejó de ser entendido como el de aquel que sólo “cura mascotas” para entenderse, actualmente, como una pieza fundamental para preservar la salud humana. En los tiempos que corren la responsabilidad del médico veterinario ha aumentado producto de múltiples factores que han permanecido en el tiempo, pero también de nuevos desafíos que amenazan la salud humana, sean naturales o producidos artificialmente por el hombre.
En el campo de acción de la medicina veterinaria, de acuerdo al marco legal que brindan sus incumbencias, el veterinario es un agente de salud pública ya que desempeña su labor profesional preservando la salud animal en beneficio de la humana a consecuencia de su interrelación con los animales, garantizando la producción y provisión de alimentos inocuos para consumo humano.
Y es que, entre las actividades que enumera la OMS con respecto a la profesión, se deben destacar el control en la seguridad alimenticia, el estudio de enfermedades zoonóticas y su erradicación, la biodiversidad, los trabajos de laboratorio y la investigación, el desempeño en el campo agroindustrial, el cuidado del medio ambiente, la formación y capacitación de personal idóneo para cuestiones de salud pública, específicamente vinculadas con las ciencias veterinarias.
Es por todo esto que el Colegio de Veterinarios trabaja constantemente, y con plena convicción, en la revalorización del rol de los profesionales veterinarios, entendiéndolos como garantes (junto con los demás profesionales de la Medicina) de la salud pública. Y esta convicción se asienta sobre la base de “Una sola salud”, un concepto reiterado muchas veces y surgido, según afirma la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE), “de la consideración de las grandes oportunidades ligadas a la protección de la salud pública por medio de las políticas de prevención y control de patógenos en las poblaciones animales en la interfaz entre el hombre, el animal y el medio ambiente”.
Fuente: La Opinión de Pergamino