Carlos Castellani, ex titular de la cámara que nuclea a las industrias de este sector, y titular de la firma Apache agregó que hay una baja importante de ventas con relación a los años anteriores.
“Estamos con una capacidad ociosa entre el 40 % y el 50 % en las fábricas y hay una baja importante de ventas con relación a los años anteriores. Podríamos decir que el último buen año fue el 2011, después el 2012 se cayó bastante, porque además hubo una cosecha regular. Después en el 2013 se recuperó un poco y ahora en el 2014, por lo menos en lo que va del año, volvemos a estar muy complicados», señaló a a «Siempre que llovió, paró…”, Carlos Castellani, ex titular de la cámara que nuclea a las industrias de este sector, y titular de la firma Apache.
asimismo, explicó que «el año pasado, el 70% de lo que se vendió fue debido al crédito del Banco Nación, que era bastante tentador. Este año subieron los intereses, pero igualmente es una tasa más o menos interesante. Los créditos son para el cupo productivo, para la compra de bienes de capital y para la compra de maquinarias agrícolas, con una tasa subsidiada. El año pasado, estaba al 7,5% a 5 años de plazo, en tasa fija y en pesos. Este año se fue al 17,5%, que si uno va a comparar con la inflación es bastante más que eso, pero no está muy operativo, no está ágil, que es lo que estamos reclamando nosotros”, aseveró.
Consultado sobre el impacto de la situación sobre las empresas de su sector, Castellani destacó que “Para empezar, no hay horas extras como era habitual. La verdad es que el panorama se complica y la preocupación crece porque cada uno que tiene una fábrica necesita todos los meses pagar los salarios, todos los impuestos y esa es una carga, un costo, un gasto fijo que hay que sostenerlo con las ventas. Cuando había actividad la restricción de la energía era un problema, pero después de alguna forma se fue superando. A su vez, la importación, salvo en cosechadoras o tractores donde elementos como transmisión y motores muchas veces son importados, los demás implementos son de insumo nacional como en las sembradoras, acoplados auto descargables, embolsadotas, extractoras y equipos maiceros, pero el tema es que el financiamiento ha retraído las ventas y eso nos preocupa».
Castellani especificó que después tenemos el tema de las exportaciones, pero las ocupan algunas fábricas, no todas exportan. «Las que exportamos tenemos un 20% / 25% de exportación. No es fácil, hay que incorporar mercados, viajar, etc. Lleva su tiempo; después hay que conservar estos mercados en base a una estabilidad económica que a veces faltó y eso nos trajo algunos problemas en distintos mercados”.
Respecto al mercado interno, el empresario consideró que, si bien los sectores que están con máquinas y equipos para siembra esperan que “haya cierta recuperación de la actividad en los próximos meses”, la realidad es que “la situación actual es preocupante. El capital de giro que tienen las empresas está acotado; también a veces el gobierno demora en el reintegro del reembolso a las exportaciones y el I.V.A. técnico. Nosotros pagamos el 21% en la materia prima y cobramos el 10,5% entonces tenemos un crédito que se demora mucho en la devolución y las fábricas que están con ese problema también están protestando. Después está el bono que está suspendido desde diciembre. Ese era un aliciente que probablemente se vuelva a reinstalar, con lo cual eso sería un apoyo y a lo mejor ahí se vende un poco más, pero hasta mayo no lo tenemos. Era el 14% de una rebaja que se le hace al productor y después el gobierno devuelve con un bono que uno paga impuestos”.
Fuente: Infocampo