La Mesa de Enlace Agropecuaria de Pergamino, formada por Sociedad Rural Argentina, Coninagro, Federación Agraria Argentina filial Pergamino, Sociedad Rural de Pergamino, y productores autoconvocados; comunican que ayer viernes se llevó a cabo una reunión en la sede de F.A.A, con motivo de los numerosos hechos de inseguridad que vienen ocurriendo en la zona, donde nuevamente en uno de ellos esta semana, hubo que lamentar la muerte de otro productor agropecuario, el Sr. Marcelino Sunde.
Todas las instituciones sostuvieron la importancia de continuar unidas como sector para reclamar en conjunto a fin de lograr ser escuchadas; asimismo coincidieron que todos los días se observan hechos de inseguridad en el interior y cada vez con más violencia ocurren en los campos. Por ello, hace un tiempo los productores se vieron expulsados del campo para tener que vivir en los pueblos por cuestiones de mayor seguridad y ahora la situación comenzó a hacerse insostenible hasta para ir a trabajar.
“Lo sucedido a Marcelino Sunde, le podría haber ocurrido sin duda a cualquiera de los miles de productores que todavía viven en el campo. Es por eso que hacemos nuestra, no sólo la tristeza por esta irreparable pérdida, sino el reclamo por mayor seguridad e infraestructura rural indispensable para el necesario bienestar de las comunidades del interior” declararon.
A nadie escapa todo lo que el campo aporta al Estado, y lo poco que recibe en materia de asistencia (ni en la seca ni en las inundaciones), caminos y seguridad. El productor agropecuario está agobiado a nivel impositivo y a nivel laboral, cada día cuenta menos infraestructura para trabajar (policías sin recursos, caminos abandonados, falta de obras), mercados cerrados que causan a la vez retrasos en la actualización tecnológica y pérdida de competitividad a nivel internacional; a lo que se suman, los numerosos hechos delictivos y la falta de respuestas por parte de la justicia y los gobernantes.
A la vez recordaron que no es la primera vez que las instituciones se reúnen por esta problemática y de hecho se han elevando propuestas en reiteradas ocasiones, a las propias fuerzas estatales para buscar soluciones en conjunto, sin obtener ninguna respuesta hasta el momento.
Por eso finalmente concluyeron: “No reclamamos subsidios, no reclamamos ayuda, pagamos nuestros impuestos y obligaciones como ciudadanos y simplemente queremos que se respeten nuestros derechos constitucionales, de vivir y poder trabajar en paz”.