Lejos de los récords de maíz y trigo, la producción de este grano en Córdoba se derrumbó en las últimas cuatro campañas. Los números que dejó la cosecha 2016/17.
Para el Gobierno nacional, el campo es el “motor” de la economía argentina y el maíz y trigo, de la mano de la eliminación de las retenciones y los ROEs, son los que rápidamente se subieron al tren del optimismo, marcando récords históricos de producción.
Sin embargo, esta tendencia no se extendió a todos los cereales: el sorgo, por caso, volvió a mostrar una caída productiva el último año en la provincia de Córdoba.
Datos
El cuadro de situación elaborado por la Bolsa de Cereales de Córdoba muestra variaciones positivas sólo en dos ítems: el rendimiento, que aumentó de 52 a 55 quintales por hectárea; y la superficie destinada a forraje, que se incrementó 50 por ciento, hasta 53.300 hectáreas.
El resto de las variables relevadas son todas negativas: la siembra, de 115.300 hectáreas, se redujo nueve por ciento en un año y 57 por ciento desde el ciclo 2013/14; y la producción, de 325.600 toneladas, cayó 28 por ciento respecto a la última campaña y es un tercio de la que hubo cuatro temporadas atrás.
Dicho de otro modo, en los últimos cuatro ejercicios, el sorgo perdió en Córdoba más de 150 mil hectáreas y más de 700 mil toneladas.
El precio en el mercado también cayó en la última campaña, de 143 a 115 dólares por tonelada, lo que desembocó en que el valor bruto de la producción de sorgo se ubicara en sólo 46 millones de dólares, 100 millones menos que en el ciclo 2012/13.
Fuente: La Voz del Interior