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Según la Bolsa de Comercio de Rosario, en el 70% de la provincia de Buenos Aires sólo se registraron 30 milímetros
Las lluvias del fin de semana dejaron un gusto a poco en el campo, necesitado de abundantes precipitaciones que corten una situación de sequía que no solo afecta el desarrollo de los cultivos de soja y maíz, sino que también hizo que en algunas regiones no se pudiera concluir la siembra de soja.
Si bien hubo buenos registros de lluvias en el sur bonaerense, parte de Santa Fe, algunos sectores de Córdoba, Entre Ríos y el norte de la provincia de Salta (con algunos lugares que superaron los 50 milímetros), en gran parte de las regiones las precipitaciones no fueron las esperadas. En un informe, la Bolsa de Comercio de Rosario puso en números lo que ocurrió, por ejemplo, en la provincia de Buenos Aires. Allí, el fin de semana el 70% de la provincia recibió menos de 30 milímetros, lo cual agravó la situación de estrés hídrico en los cultivos.
«Las áreas más necesitadas del centro y el norte bonaerense son las que menos recibieron agua: quedaron por debajo de los 10 mm», consignó la entidad.
Esteban Copati, jefe de Estimaciones Agrícolas de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, indicó que las precipitaciones fueron «muy heterogéneas». Y explicó que si bien hubo buenos milímetros en sectores de Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos y también en el norte de Salta, «aún hay zonas que no recuperaron humedad».
«Para lo que resta sembrar en el norte aún falta humedad en el sur de Salta y en sectores de Tucumán y el oeste de Santiago del Estero. Y en el NEA también deberá llover nuevamente para poder finalizar la siembra», señaló.
En este contexto, ayer un informe de la Oficina de Riesgo Agropecuario (ORA) del Ministerio de Agroindustria de la Nación señaló que la provincia de La Pampa y el noroeste de Buenos Aires «presentan una ampliación del área con sequía». Agregó que para el maíz de siembra temprana (septiembre) «las condiciones de sequía siguen siendo críticas para gran parte de la extensión agrícola».
En el centro-norte bonaerense los productores contabilizaron un bajo milimetraje que los dejó preocupados porque esperaban más lluvias. «Desde el viernes en Manuel Ocampo cayeron 3 mm y en la ciudad de Pergamino hubo registros muy distintos: 12 mm, 3 mm, 1 mm. El panorama no es desastroso pero estábamos esperanzados en esa lluvia para tener rindes buenos para poder cubrir los costos», dijo Marcelo Testa, productor y contratista en la zona de Pergamino.
Jorge Calandri, gerente de Mario Calandri Acopiadores, afirmó: «Hay una preocupación general en la zona. Las lluvias han sido muy justas y se ha sembrado tarde: el 40% de la soja de primera tiene un retraso de 20 días, aproximadamente».
En tanto, Ignacio Viel, productor del partido de Chivilcoy, también alertó por la situación en esa región bonaerense. «Los pronósticos que anunciaban entre 40 y 50 mm nos han jugado una mala pasada. La soja de segunda en La Rica (en el partido de Chivilcoy) corre serios riesgos de fracaso: se hizo con 23 mm el 5 de enero y ahora con 5 mm más», apuntó.
En el norte
En Salta hay una situación complicada para la siembra de soja en el departamento de Anta (Las Lajitas), que es por excelencia productor de este cultivo. Ignacio Chavarría, director general de Ganadería y Producción Animal de Salta, contó a LA NACION: «El este salteño, en la zona de Anta, es el que verdaderamente se encuentra dentro de una realidad límite; ha llovido muy poco. Sólo un 40% de la soja se sembró, cuando la brecha de siembra ya debería estar finalizando.»
En Chaco, en algunas localidades como Villa Angela y Charata aún esperan el agua para poder terminar la siembra de algodón y empezar con la de sorgo, maíz y soja. Ante una consulta, el asesor Ricardo Readdy graficó sobre el panorama en esa zona. «Si bien la situación es difícil, no es terminal; todavía nos quedan un par de semanas de margen para implantar soja y maíz», dijo.
Informe de Josefina Pagani y Mariana Reinke
Fuente: La Nación
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