Según un estudio de IES Consultores se esperan avances en la cosecha de soja y trigo, pero una merma en la producción de maíz y de la cebada. La oleaginosa le sigue quitando terreno al cereal por una cuestión de costos y rentabilidad.
La producción agrícola de la campaña 2013-2014 podría llegar a 102,1 millones de toneladas, ya que se prevén avances en la cosecha de soja y trigo, pero una merma en la producción de maíz y de la cebada, según la primera proyección de IES Consultores.
De acuerdo con este estudio, la participación de las exportaciones del sector agrícola en el total de ventas al exterior llegó al 42,4% en el acumulado a julio de 2013, superior al 40,4% de igual período de 2012.
De esta forma, “el sector agroindustrial demostró que es el más importante en el comercio exterior argentino”.
Según el último estudio de la consultora, las exportaciones del sector agrícola, en valor, aumentaron 1,6 por ciento respecto del mismo período de 2012 al acumular en los primeros siete meses de 2013, un total de 19.145,1 millones de dólares.
Sin embargo, la suba fue por una cuestión de precios ya que los volúmenes exportados cayeron en este período 7,1 por ciento, al sumar 45,9 millones de toneladas.
Respecto de la estimación productiva, Investigaciones Económicas Sectoriales advirtió que la cosecha agrícola del ciclo 2012-2013 finalizó con una elevada producción total de granos, con una producción de 100,2 millones de toneladas, y verificó una expansión de 9,7% respecto de la recolección previa.
“Nuestra primera proyección de la producción agrícola del ciclo 2013/14 es de 102,1 millones de toneladas, donde prevemos avances en la cosecha de soja y de trigo, y una merma en la producción de maíz y de la cebada”, sostuvo el análisis.
Al detallar las exportaciones, respecto de las oleaginosas constataron que en los primeros siete meses de este año se exportaron 4,5 millones de toneladas de granos por un valor de 2.502 millones de dólares que representa un incremento de 7,8% cantidades y de 10,6% en valores con respecto a igual período de 2012.
Del valor total, 2.304,8 millones de dólares corresponden a las exportaciones de soja, con una suba de 14,7% en valores, mientras que en cantidades crecieron 8,2%, al despacharse 4,4 millones de toneladas.
Hasta julio de este año, las exportaciones de aceites y subproductos fueron de 9.381 millones de dólares, lo que implicó una contracción del 4,3% con respecto a igual período de 2012, mientras que las cantidades exportadas tuvieron una merma de 16% con relación al período previo, al despacharse 17 millones de toneladas.
China ocupó el primer lugar como el principal comprador del país en valores y cantidades, con una demanda de 2.245 dólares y un volumen de 3,9 millones de toneladas (11,7% y 8,5% del total, respectivamente).
Brasil tuvo una participación de 6% del volumen exportado, mientras que el valor de los negocios fue de 5% del total, seguido, “en valores, por Argelia (4,9%), Egipto (4,6%), Arabia Saudita (4,5%), Indonesia (4,3%) y otros 132 países participan con el 65% del total”.
Con relación a la producción, los especialistas analizaron que la combinación de los problemas de rentabilidad de los agricultores, y la necesidad del maíz de una fuerte inversión inicial para sembrar por su elevado requerimiento de fertilizantes, se prevé un reemplazo del cereal por la soja, que dominará nuevamente el próximo ciclo agrícola.
Si bien aumentará el área sembrada con trigo, su avance será mucho menor al esperado, dada la falta de certidumbre respecto del anuncio del Gobierno sobre la devolución de las retenciones a las exportaciones que había prometido meses atrás con el fin de promover la siembra, y, por ende, la producción final se ubicará muy por debajo del promedio histórico.
Fuente: La Opinión de Pergamino