Argumentan que los cambios son innecesarios y que el sistema vigente es suficiente para la autoridad fiscal.
Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) salió al cruce de la nueva iniciativa de la Afip. Es que la entidad argumentó que el sistema vigente de trazabilidad animal, desarrollado por el SENASA (SIGSA), permite conocer las existencias de ganado bovino, como así también su movimiento, compras, ventas, peso, categorías y precio, lo que resulta claramente suficiente para que la autoridad fiscal pueda realizar sus tareas de control en forma eficiente.
La semana pasada, la Afip aprobó un nuevo sistema fiscal que permitirá la identificación de todo el ganado del país. Bajo las siglas SIFTA, el proceso colocará un dispositivo de identificación a los animales, cuyos datos serán incorporados a la base del organismo.
Según la entidad agropecuaria, el sistema actual obliga a los ganaderos a movilizar su ganado al amparo de documentación oficial que así lo autoriza (DTe). Asimismo los movimientos del ganado se efectúan con carga protegida por precintado del camión cuyos datos constan en el documento de tránsito.
En el caso de remisión a faena los controles deben efectuarse en frigoríficos; en tanto que los números de animales remitidos, las categorías, peso de la tropa y datos del remitente, son informaciones que permiten en destino (planta faenadora) efectuar sin problemas las tareas de control fiscal y comercial. En este mismo sentido es necesario incorporar en el menor tiempo posible el “guardaganado electrónico”, que permitiría contar con una caja negra para el control fiscal.
Para aplicar lo dispuesto por la Resolución General 3649 (que comprende a la identificación y trazabilidad electrónica del ganado bovino), debería previamente evaluarse su viabilidad técnica y administrativa, es decir el costo-beneficio y demostrar claramente la necesidad de su aplicación en el rodeo argentino, con una magnitud de 50 millones de cabezas y su distribución en un vasto territorio, y con movimientos anuales cercanos a los 30 millones de cabezas. Su aplicación resulta una tarea de enorme dificultad, sino imposible.
Como conclusión CRA expresa claramente que no resulta necesario proceder a efectuar cambio alguno en el sistema vigente de trazabilidad animal.
Fuente: Punto biz