Debido a las trabas a los envíos del cereal, desde el país vecino aprovechan la demanda del gigante latinoamericano para colocar su cereal. Estados Unidos se constituyó como el proveedor principal.
Los molinos brasileños encontraron nuevos proveedores a las importaciones habituales del cereal, como Estados Unidos. Pero también está aprovechando la oportunidad Uruguay, que concluyó con su cosecha y busca colocar su excedente en esa plaza comercial.
Desde la ribera oriental del Río de la Plata, 150.000 toneladas habrían sido embarcadas en diciembre a Brasil y el ritmo sería mayor para lo que resta de enero y los próximos meses. Según indica el diario La Nación, el saldo exportable total supera para este año un millón de toneladas.
La situación es novedosa. Mientras Argentina, que tradicionalmente para esta época del año abastece al gigante administrado por Dilma Roussef, cesó con el comercio exterior de trigo, Uruguay vio la oportunidad de aumentar sus ventas por este concepto.
El cambio de tendencia en el mercado granario se explica luego de que el Gobierno restringió las exportaciones de trigo, reforzadas los últimos días con la suspensión del CUIT a la cerealera Nidera por haber concretado un embarque del cereal a Brasil, a pesar de que contaba con la autorización correspondiente.
Fuente: Infocampo